Desde Tirana, la capital de Albania, la Congregación de don Orione, los orionistas, relatan la inauguración del Año de la Fe, que en Albania tiene un especial significado. El pasado 19 de octubre en la Celebración Eucarística que tuvo lugar en la Catedral de San Pablo de la capital albanesa el Arzobispo de Tirana-Durazzo, Mons. Rrok Mirdita señalaba en la homilía: “La Iglesia albanesa no estuvo presente con ninguna delegación en el Concilio Ecuménico Vaticano II, pero sí estuvo presente con el testimonio de sus mártires”.El 19 de octubre se celebraba el día de la beatificación de la Madre Teresa de Calcuta
En esta inauguración del Año de la Fe estuvieron presentes los obispos albaneses pero, sobre todo, los jóvenes de las comunidades católicas de todo el país, guiados por sus respectivos párrocos, con una participación de cerca de 70 parroquias.
Según cuentan los misioneros de don Orione presentes en el acto, entre los bancos estaba un sacerdote de 80 años, el padre Ernest Troshani. Este sacerdote sufrió 27 años de prisión, en trabajos forzados, lo que el régimen comunista que rigió los destinos de Albania llamaba “campos de reeducación en el trabajo”. De estos 27 años, 15 los pasó en las minas. No obstante su edad, sigue siendo párroco en la localidad de Trush.
OMPRESS-ALBANIA (26-10-12
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