En su juventud no quiso saber nada de Dios y se dio a una vida fácil, de desenfreno, pero a los veintiocho años encontró la fe, y a partir de entonces se propuso «gritar el Evangelio con toda su...
En su juventud no quiso saber nada de Dios y se dio a una vida fácil, de desenfreno, pero a los veintiocho años encontró la fe, y a partir de entonces se propuso «gritar el Evangelio con toda su...