El arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, recordó el pasado miércoles que ante la cercanía del Año Santo es importante establecer dos premisas para una propuesta cultural en relación con celebración jubilar: El espiritual ha de ser el centro sobre el que articular las actividades, y eso implica que la catedral y su entorno tiene que adquirir un destacado protagonismo procurando, al mismo tiempo, abrir perspectivas para el conocimiento y vivencia de las riquísimas expresiones culturales creadas por la humanidad para dar respuesta a su inquietud de transcendencia”. El prelado participó este miércoles en la presentación del libro «La catedral de los Caminos: Una biografía de la Iglesia de Santiago», un acto al que asistió también el conselleiro de Presidencia de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, la responsable de Turismo de Administración autonómica, Nava Castro, así como el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo. Estaban presentes, además, el coordinador de la edición del volumen, Xosé Manuel Villanueva, así como el deán de la Catedral, Segundo Pérez, y Daniel Lorenzo, responsable de la Fundación Catedral.
Monseñor Barrio explicó que el Año Santo 2021 “es una ocasión providencial para dar relevancia a la naturaleza espiritual de la celebración y para evitar una desvalorización de lo que es y significa. Esto no solo es necesario para respetar su esencia, sino para mantener la cualidad y calidad del evento y de la experiencia que viven los peregrinos y visitantes. Es más necesario aún cuando estamos inmersos en la pandemia de la covid que está afectando a los fundamentos sobre los que nos organizamos en nuestra sociedad”.
Dos líneas culturales
Además, comentó que “la Iglesia compostelana desea desarrollar dos líneas culturales integradas en su acción pastoral: La creación de belleza y la transmisión de la belleza creada. La primera responde a la idea de contribuir a incrementar el acervo artístico asociado a la Catedral y al fenómeno jacobeo. El estímulo a la nueva creación ha de tener una presencia viva en una acción cultural digna de la dimensión universal alcanzada por la casa del Señor Santiago. La segunda es divulgar y poner a disposición de fieles, peregrinos y visitantes el patrimonio artístico ya acumulado, cuya actualización conecta la experiencia presente de las personas con las vivencias de generaciones y generaciones, desde hace más de mil años”.
En este sentido, el prelado compostelano manifestó que “a esas dos intenciones responde el libro. Es el reflejo de la genealogía, geografía e historia de esta catedral que es un referente para Santiago, Galicia, España, Europa y los otros continentes. No olvidemos de que a partir de la aparición del sepulcro del Apóstol Santiago con el correr del tiempo se construyó este santuario de singular belleza y ornato”.
“Esta publicación”, añadió, “por un lado, supone poner a disposición de fieles y peregrinos un bello objeto, un elemento patrimonial más nacido de la Iglesia de Santiago. Por otro, hace accesible en el presente una historia de más de mil años, en la que el templo compostelano ha sido objeto de una intensa acción devocional y artística de generaciones y generaciones de personas”.
El arzobispo dijo que “por ello, presentar este libro hoy que nos narra el pasado y nos hace mirar al futuro, a pocos días de la apertura de la Puerta Santa y del comienzo del Año Jubilar 2021, es un motivo de júbilo. También, es una invitación a comenzar una nueva peregrinación, no física o territorial, sino interior y en el tiempo. Metafóricamente podría decirse que el Apóstol Santiago nos espera también en las páginas de este libro”.
