Las Fraternidades de Terciarios Capuchinos descubren las raíces franciscanas de Menorca
Han vivido unos intensos días de convivencia en la vecina isla de Menorca.
Los días 27 y 28 de enero, las fraternidades de terciarios franciscanos del convento de Capuchinos de Palma y la del monasterio de Concepcionistas Franciscanas de Mahón, han vivido unos intensos días de convivencias en la vecina isla de Menorca.
Con un apretado programa, los dos días han transcurrido en un auténtico ambiente de fraternidad franciscana. A las obligadas visitas a la Catedral, Museo Diocesano y otras iglesias y monumentos de la isla, hay que añadir aquellas que pueden enriquecer la espiritualidad de ambas hermandades franciscanas seglares. Compartieron ratos de oración y convivencia con las monjas clarisas del Real Monasterio de Santa Clara de Ciutadella, con las Concepcionistas Franciscanas de Maó y, han peregrinado hasta el santuario de la Virgen del Toro, con la comunidad de Franciscanas Hijas de la Misericordia que custodia aquel lugar tan venerado de los menorquines.
Cabe destacar la visita que se hizo en el pueblo de Ferreries. En la iglesia parroquial de este municipio se pudo venerar el sepulcro del Beato Juan Huguet y Cardona, presbítero de la iglesia menorquina que recibió el martirio en 1936 tras treinta y tres días de su Ordenación Sacerdotal. Luego también, los esperaban las sobrinas de otro beato ferrerienc, el Beato Ángel de Ferreries, capuchino que fue coronado con las palmas del martirio, el mismo año, en el convento de los frailes menores capuchinos de Sarrià.
30 de enero de 2018
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