La vida de Elena Romera, vivida junto a Jesús en la Cruz
Presentación del libro “Yo soy para mi amado” que recoge los testimonios sobre Elena Romera Santillana, una joven cristiana que murió de cáncer tras 7 años de dura enfermedad, siendo un gran testimonio de fe. El evento, al cual asistieron 500 personas, tuvo lugar ayer en Caravaca de la Cruz, su pueblo natal.
Ayer se celebró en Caravaca de la Cruz (Murcia), lugar donde nació y murió Elena, un emotivo y multitudinario acto (500 personas) con ocasión de la presentación de su libro biográfico: “Yo soy para mi amado”. Durante el evento, la escritora del libro, la periodista Mª Victoria Luque, confesó “Para mí ha sido un regalo poder conocer los testimonios de la vida de Elena porque gracias a esto tengo la certeza de que existe la Vida Eterna”
Él libro muestra la vida de una joven sencilla que puede ser ejemplo de madurez ante la adversidad, de generosidad para con los demás, cuando parece que eres tú quien lo necesita todo y de afrontar la debilidad y el dolor de tal modo que se convierta en bien para sí y para quienes te rodean.
Elena encontró en la fe de sus padres, vivida también en el seno de su comunidad neocatecumenal, la fuente vital que le permitió afrontar durante siete años de su corta vida, asumiendo momentos y situaciones humanamente muy difíciles, de las que supo sacar provecho para sí misma y para tantos otros jóvenes…
Porque la fe sí vale para vivir… precisamente para obtener, de situaciones que a la razón humana parecen negativas, ciertamente dolorosas, la riqueza de la fortaleza, de la generosidad, de la alegría… increíble, pero cierto, porque la fe cambia radicalmente el modo en que el hombre vive y experimenta las situaciones de Cruz… Ello ha impulsado al sacerdote Manuel… a promover la recopilación de la experiencia de fe de esta joven de nuestro tiempo como ayuda para tantas personas que puedan enriquecerse con ella.
De momento, lo importante es que la experiencia de Elena, plasmada de modo ágil y vivo en este libro por la periodista María Victoria Luque Vega, y editada por la Asociación sin ánimo de lucro “Bendita María”, puede abrir nuevos horizontes a tantos jóvenes y no tan jóvenes en la vida cotidiana, tantas veces falta de luz y esperanza.
Elena terminó sus días solicitando, y siendo admitida, en la Congregación de las Misioneras de la Caridad (Madre Teresa de Calcuta), demostrando así hasta el final que el amor inmenso que había recibido quería ponerlo al servicio de los más pobres.
El libro está dedicado especialmente a los que están buscando la felicidad porque, según la escritora, “Elena buscó y lo encontró”.
Descripción del libro:
Elena Romera Santillana vivió con el cáncer siete años, pasó por siete intervenciones quirúrgicas, varias sesiones de quimioterapia, una prótesis en la rodilla, la rehabilitación —durísima— de su pierna y su posterior amputación. Luego vino el cáncer de pulmón y la muerte. Sin embargo, estos siete años fueron oro probado en el crisol; fueron el tiempo en que ella conoció a su Amado. El Señor le dijo: «Aquí estoy, en la cruz me encontrarás.» Y ella lo encontró en la cruz. Decía a quien la quisiera oír: «El cáncer no es una desgracia. Es el regalo que el Señor me ha hecho; en la cruz he conocido el amor que mi Padre me tiene. El cáncer es un regalo envuelto en un papel feo, en un periódico viejo; pero la cruz no me mata, a mí me mata interiormente no amar como yo quisiera. La cruz no es lo que me quita la paz». Parecería que nacer en tal o cual lugar es indiferente, que no imprime carácter, pero la realidad es otra. Por una hermosa «casualidad», Elena nació en Caravaca de la Cruz, un pueblo de la provincia de Murcia, donde se venera una astilla de la verdadera cruz de Cristo. Y esto, que parecería una inocente coincidencia, resulta sin embargo muy significativo en esta historia de Elena. En este libro hay escondida una promesa, un fiat, y un cumplimiento de esa promesa. La promesa la entrevemos en un viaje que Elena hace a Santiago de Compostela siendo jovencita. En esa peregrinación Elena escucha un texto del profeta Isaías (62,4): «Ya no te llamarán “Abandonada”, ni a tu tierra “Devastada”; a ti te llamarán “Mi predilecta”, y a tu tierra “Desposada”». Elena se lo cree y lo guarda en el corazón como María. Esta es la primera parte de esta historia de amor. La segunda parte comienza cuando su director espiritual, el Padre Sevillano, le hace una pregunta, inspirado por el Espíritu Santo. A Elena por poco le da un pasmo. «No me respondas a mí, respóndele a Él en tu corazón; ten en cuenta que los esposos duermen en el mismo lecho, y que el lecho de tu Esposo es la cruz». A partir de ahí Elena empieza no ya a correr, sino a volar en la fe… y en el amor. Y el Señor, que es fiel, cumplirá su promesa y se celebrarán sus Bodas.
Sobre el autor
María Victoria Luque Vega. Barcelona, 1965. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid (1989). Periodista católica y madre de familia numerosa, ha trabajado en la revista Familia Cristiana-España durante cinco años y colaborado en distintos Medios de Comunicación Social, como Cooperador Paulino; revista Más, de las Hermandades del Trabajo; revista 60 y Más, del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales; Alfa y Omega (ABC)… Actualmente es redactora-jefe de la revista Cooperador Paulino y miembro de su Consejo de Redacción. También es miembro del Consejo de Redacción de la Asociación Bendita María y colaboradora habitual de la revista Buenanueva. La autora de Yo soy para mi Amado ha publicado igualmente con nuestra editorial el libro juvenil titulado Los siete viajan a China (Colección FÁBULA, 2012).

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