Por Antonio DIAZ TORTAJADA, sacerdote-periodista
La catedral metropolitana de Valencia ha sido, en el orden diocesano, sede de la apertura del “Año de la Fe”, convocado por el papa Benedicto XVI. La catedral estaba engalanada para el acto.
Junto al arzobispo de Valencia, Carlos Osoro Sierra, y su obispo auxiliar, Enrique Benavent, ha concelebrado el Consejo de Gobierno de la diócesis, el cabildo catedralicio, un gran número sacerdotes y más de un millar de fieles.
El Arzobispo ha pedido a los fieles valencianos que vivan el Año de la Fe “con el anhelo y la tensión positiva de volver a anunciar a Jesucristo, de confesar la fe en él y de profesarla públicamente y sin ambigüedades, sin escondernos”. “¿Es que hay que esconder a quien da sentido y profundidad a la vida humana y a la historia?”, dijo.
“Nuestra tarea hoy es la misma que la de estos santos nuestros que han vivido la fe aquí en Valencia, hacer resplandecer la verdad y la belleza de la fe con nuestra propia vida, como ellos lo hicieron, sin sacrificar la fe a exigencias encadenadas a cualquier cosa”, ha manifestado el prelado.
“El anhelo que todos estos santos tuvieron de anunciar a Cristo en su tiempo es lo que tiene que provocar en nosotros este Año de la Fe”, ha reiterado monseñor Carlos Osoro, quien ha subrayado que “hoy más que nunca evangelizar quiere decir testimoniar una vida nueva transformada por Dios y así indicar el camino”.
Además, el Arzobispo ha invitado a celebrar el Año de la Fe de manera “digna y fecunda” y ha propuesto a los fieles asumir “como obligación, como hacían los primeros cristianos” el aprendizaje del credo “de memoria, pero no solamente para aprender unas palabras sino para vivir las consecuencias que tiene para nosotros esa confesión de la fe”. Igualmente, ha invitado a “tomar como obligación recoger del catecismo los contenidos fundamentales de la fe católica e incorporarlos a nuestra vida, como hicieron todos estos santos valencianos que hoy nos acompañan”.
El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, con anterioridad a la celebración eucarística presentó en rueda de prensa los proyectos e iniciativas previstos con motivo del Año de la Fe en la archidiócesis de Valencia, y resaltó que es un tiempo para ayudar “a todos los creyentes a que su adhesión al Evangelio sea más consciente y más vigorosa en este momento de profundo cambio que la humanidad está viviendo”, ha añadido.
El prelado señaló, en la misma rueda de prensa que, “la crisis moral, ética y antropológica que vive la sociedad, y que es la causa de la crisis económica, nos exige tomar otra vez confianza en la verdad” y, para los cristianos “la verdad del ser humano solamente se entiende y se descubre desde el Señor”. Según monseñor Osoro, “la necesidad de la verdad en este momento histórico que vivimos, es fundamental para construir la convivencia y para vivir”.
Además de las actividades del Año de la Fe, en rueda de prensa se han presentado todas las acciones que se van a llevar a cabo en la diócesis; éstas tienen como objetivo “ayudar a los cristianos a reforzar su fe, a que sean testigos de ella en medio del mundo”, así como ayudar a los no cristianos a acercarse de una manera nueva también a la vida de la iglesia.
Entre las acciones, ya anunciadas en la Carta pastoral del Arzobispo, que se desarrollarán en la diócesis de Valencia se encuentra “Misión en Valencia, Porta Fidei” (‘La puerta de la fe’), un proyecto impulsado por el Arzobispo para la próxima Cuaresma en el que más de 400 sacerdotes predicarán en todas las parroquias de la diócesis, como una “misión especial”.
Igualmente se ha señaló otro proyecto en el que el arzobispo pedirá a los jóvenes que se ofrezcan como voluntarios, a partir de noviembre, para evangelizar en sus propios ambientes, ya sea “la universidad, el trabajo, la calle, la discoteca o en otros lugares” y para ello, les impondrá también una cruz misionera.
Entre las propuestas citadas por el arzobispo se encuentran el propio Itinerario Diocesano de Renovación (IDR), que ha promovido monseñor Osoro en la archidiócesis hasta 2014, orientaciones de pastoral vocacional, la Adoración Eucarística Perpetua puesta en marcha en Valencia, facilitar el sacramento de la Confesión con horarios en todas las comunidades parroquiales, así como la dirección espiritual, el proyecto Persona y Economía de comunión, además de potenciar el “compromiso con Cáritas de todos los cristianos” haciendo que esté presente en todas las parroquias, y la programación de seminarios, conferencias, reflexiones y acciones que ayuden a vivir “El Año de la Fe”.
La catedral de Valencia permanecerá engalanada, hasta noviembre de 2013, con unos grandes tapices de lona con imágenes de los santos valencianos o ligados a la archidiócesis valentina para recordar su testimonio como testigos de la fe.
Las imágenes han sido tomadas de los fondos de las pinacotecas de la Basílica de la Virgen, de la Catedral, del Colegio Seminario del Corpus Christi, del Colegio Seminario de la Presentación y Santo?Tomás de Villanueva, del Rectorado de la Universidad.
En total son quince tapices, seis interiores y nueve exteriores, los que permanecerán expuestos hasta la conclusión del Año de la Fe el 24 de noviembre de 2013, en la solemnidad de la fiesta de Cristo Rey.
Los tapices interiores –con unas medidas de seis metros de alto por dos y medio
de ancho– estarán dispuestos en los arcos de la nave central de la catedral valenciana enfrentados de dos a dos. De este modo, estarán representados san Vicente Mártir, san Vicente Ferrer, san Juan de Ribera, santo Tomás de Villanueva, santa Teresa de Jesús Jornet y la beata Josefa Naval Girbés de Algemesí.
En la parte exterior de la Catedral, en el conocido como “balcón o lonja de los canónigos”, recayente a la plaza de la Virgen, se ubicarán los tapices de los Mártires Valencianos, san Pedro Pascual, san Francisco de Borja, san Pascual Bailón, santa María Micaela, san Jacinto Castañeda, de los santos Vicente Ferrer y Vicente Mártir juntos, la beata Inés de Beniganim y san Luis Bertrán. Estos tapices son sensiblemente más pequeños que los del interior de la Catedral y miden tres metros y medio de alto por uno y medio de ancho

Añadir comentario