Más de 200 jóvenes se preparan ya para participar en la XVIII edición de la Escuela de Pastoral con Jóvenes (EPJ), que se celebrará los días 28 y 29 de septiembre en Salesianos de Atocha. Este año el tema central será la exhortación postsinodal Christus Vivit y los jóvenes serán los verdaderos protagonistas de estas dos jornadas. Precisamente el domingo 29 por la mañana el obispo de Teruel y Albarracín, Antonio Gómez Cantero, participará en una mesa redonda en la que podrá dialogar con diferentes jóvenes. Con el lema «EnRedAndoNos» esta edición busca conocer y generar reflexión pastoral conjunta», además de facilitar espacios para compartir la experiencia en dos de los siete caminos que se nombran en la exhortación.
Desde la organización destacan la sinodalidad que buscan en la Escuela, sostenida por una atractiva espiritualidad juvenil. El equipo encargado del contenido ha elaborado un documento marco, tras su reflexión y trabajo sobre la sinodalidad, porque tras ser la palabra más repetida en el Sínodo, cabe preguntarse si no serán los mismos jóvenes los que están marcando el camino de esa sinodalidad. En el docuento se destacan las actitudes sinodales como «abrirse a lo nuevo», «vivir con esperanza» o «recuperar la santidad». «Nuestra contribución consiste en ofrecer un espacio formativo para agentes de pastoral y educadores de distintas instituciones que tienen en los jóvenes el centro de su misión».
La EPJ es una iniciativa interinstitucional promovida por una decena de instituciones, entre las que se encuentran dos delegaciones diocesanas de pastoral con jóvenes (La Rioja, León y Toledo), cinco congregaciones religiosas (Marianistas, Escolapios, La Salle, Salesianos y Vedruna) y tres asociaciones laicales (Acción Católica, Institución Teresiana-Acit Joven y Adsis). Nació en 2001 como espacio formativo para miembros de las comunidades Adsis. A raíz del Fórum de Pastoral con Jóvenes se abre a otras organizaciones eclesiales, primero solo en su convocatoria y finalmente también en su organización y desarrollo, a fin de disponer de un marco común de formación para agentes de pastoral.
