Después de la oración mariana y del responso por los difuntos, en sus saludos en polaco, Benedicto XVI puso de relieve, con un cordial saludo a Su Santidad Kiril I, la visita y estancia en Polonia del Patriarca de Moscú y de todas las Rusias, como esperanzador impulso ecuménico:
«Doy la bienvenida a todos los polacos. En estos días es huésped de la Iglesia ortodoxa de Polonia el Patriarca de Moscú y de todas las Rusias Kirill I. Saludo cordialmente a Su Santidad, así como a todos los fieles ortodoxos. El programa de esta visita incluyó también encuentros con los Obispos católicos y la declaración común del anhelo de hacer crecer la unión fraterna y de colaboración en la difusión de los valores evangélicos en el mundo contemporáneo, en el espíritu de la mis fe en Cristo Jesús. Éste es un evento importante, que suscita esperanza para el futuro. Encomiendo sus frutos a la benevolencia de María, implorando la bendición de Dios ¡alabado sea Jesucristo!»
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