Durante la audiencia de este martes, el Promotor de Justicia Vaticano, Nicola Piccardi, anunció, por orden del presidente, Giuseppe dalla Torre, una investigación para analizar las condiciones carcelarias del detenido Paolo Gabriele ya que el imputado aseguró que pasó el primer día en una celda que no cumplía las condiciones necesarias por lo pequeña que era.
También afirmó que sufrió presiones psicológicas, ya que – afirmó- durante la primera noche se le impidió usar la almohada, y que durante veinte días tuvo encendida la luz las 24 horas del día.
A este respecto el portavoz vaticano, padre Federico Lombardi aseguró -en posterior rueda de prensa- que las condiciones de detención de Gabriele han sido “muy humanas”. ”También la celda más pequeña en la que estuvo inicialmente detenido, aclaró, respeta las normas internacionales a las que el Vaticano adhiere. Durante su detención se han tomado medidas a favor de su buena condición, le ha sido asegurada asistencia médica, espiritual, ha recibido visitas de su familia y de sus abogados”.
”Decir – agregó el padre Lombardi – que ha recibido trato inhumano, cuando en cambio se le ha prestado la mayor atención, plantea “no pocos interrogantes” que luego ”los magistrados investigarán”. La apertura del fascículo, puntualizó el portavoz vaticano, significa también ”ver si no se han efectuado acusaciones injustas referentes a la autoridad judicial”.
(RC-RV)
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