El Papa recibió ayer a una delegación de Manresa para presentarle el Proyecto 2022 con el que se conmemorarán los 500 años de la llegada de san Ignacio de Loyola a esa localidad de 77.000 habitantes, de camino en su peregrinación hacia Jerusalén. «Se ha mostrado muy interesado en venir a Manresa, en conocer este evento del 2022 de la conmemoración del 500 aniversario de Ignacio de Loyola en Manresa», explicó el alcalde del municipio, Valentí Junyent, en declaraciones a EFE. «Ha dicho que le gustaría muchísimo venir y que en función de cómo estén las circunstancias, como esté de salud y el resto de elementos que confluyen en una visita de estas características, se lo plantearía», añadió el alcalde de Manresa.
La delegación estaba compuesta entre otros por el primer teniente de alcalde de Manresa, Marc Aloy; el concejal de Turismo y responsable de Manresa 2022, Joan Calmet, y el responsable técnico de Manresa 2022, Albert Tulleuda, y ha sido recibida por el Papa Francisco en audiencia privada en el Vaticano, un encuentro que ha durado cerca de media hora.
En la reunión, han conversado sobre el casi un año que Ignacio de Loyola pasó en Manresa, donde se inspiró para escribir los Ejercicios Espirituales y tuvo una experiencia reveladora, que marcó su vida y lo llevó a fundar la Compañía de Jesús, a la que pertenece el propio Jorge Bergoglio.
La delegación entregó al Papa diversos regalos, como un libro de la Cueva de San Ignacio; una reproducción de la estatua de la Acogida que desde 2015 se encuentra en el espacio público y da la bienvenida a los peregrinos que visitan la ciudad; la explicación detallada del Proyecto Manresa 2022 y «un poco de agua y de piedra”» de la Cueva de San Ignacio de Loyola en Manresa.
Junyent ha recordado que el consistorio está preparando diversas actividades para la conmemoración de los 500 años de la llegada de San Ignacio de Loyola a Manresa, como un congreso para jóvenes, la inauguración de una exposición y actuaciones musicales, que contarán con la presencia de artistas locales.
Todo ello, para demostrar que la celebración será de todos, «no solo de creyentes o jesuitas», sino para todos los que quieran visitar Manresa.
La delegación de Manresa también ha aprovechado para exponer al Pontífice el proyecto del Camino Ignaciano, que une Manresa con Loyola, la localidad natal de Ignacio, y el potencial que tiene como ruta de peregrinación y de crecimiento personal y espiritual, comparable a lo que era el Camino de Santiago en sus inicios, según una nota del consistorio catalán.
También le han recordado que la Compañía de Jesús ha declarado Año Jubilar ignaciano el periodo de tiempo que irá del 31 de julio de 2021 al 31 de julio de 2022, un hecho que también contribuirá a reforzar la proyección exterior de Manresa coincidiendo con la conmemoración del 500 aniversario.
