139.157 personas, sin contar las ayudas urgentes entregadas en situación de emergencia durante los primeros meses del estado de alarma. Estas son las cifras que se desglosan de la memoria de actividades de Cáritas diocesana de Madrid.
En el comunicado enviado a los medios reconocen lo «duro que ha sido este año para todos pero, en especial, para las personas más vulnerables». Como es bien sabido, la crisis sanitaria ha venido de la mano de una profunda desestructuración económica y una problemática social que la Iglesia ha tratado de atender. «En este tiempo hemos visto crecer la pobreza y el sufrimiento, aunque también la solidaridad ha brotado de manera generosa en estos meses de dificultad».
Durante los primeros meses de pandemia, las peticiones de ayuda a Cáritas diocesana de Madrid se triplicaron y más del 85 % de las solicitudes eran, principalmente, alimentos, suministros, gastos de vivienda y medicinas.
Se triplican el número de solicitudes de ayuda y el número de voluntarios
Como toda realidad, hay dos caras del mismo relato. Si bien llegaron a triplicarse el número de familias atendidas que acudían por primera vez a esta institución de la Iglesia, más de 3.000 nuevas personas voluntarias se ofrecieron para ayudar en esos meses de confinamiento.
«Ahora que la vacunación avanza y que aumenta el número de personas protegidas, me gustaría pediros que no nos olvidemos de lo que hemos vivido y, sobre todo, de que muchos de nuestros hermanos siguen sufriendo las consecuencias de esta tremenda crisis social», indica Luis Hernández Vozmediano, director de Cáritas Madrid.
Algunos datos relevantes
Gracias al trabajo y esfuerzo realizado por las 455 Cáritas parroquiales, 21 obras sociales, 299 proyectos, 82 servicios y las 9.635 personas voluntarias han permitido realizar la misión caritativa en toda la archidiócesis. Se han compartido 22.874 ayudas económicas a particulares y familias, lo que significa un aumento del 56 % respecto del año anterior, sin incluir ayudas en especie y ayudas con fondos de las parroquias. De estas ayudas, el 38 % se ha destinado a alimentación e higiene, el 30 % a suministros y alojamiento y el 32 % para otras necesidades.
Las donaciones recibidas se han incrementado en un 71 %, y el número de donantes en un 65 %, lo que ha permitido seguir acompañando durante todo el año a las familias más golpeadas por la crisis.
Del mismo modo, se han concedido microcréditos solidarios, pisos para mujeres jóvenes, entrega de menús a domicilio, alojamientos de emergencia para personas sin hogar en la sierra y puesto a funcionar el centro de distribución de alimentos en Alcobendas.
«Pan partido, alimento de fraternidad»
Este es el lema escogido para la festividad del Corpus Christi, también Día de Caridad, el jueves 3 de junio en la calle, con cerca de 400 mesas informativas distribuidas por Madrid, para presentar y dar a conocer qué es y qué hace Cáritas diocesana. Y el 6 de junio en las parroquias para celebrar la festividad del Corpus Christi y predicar que nadie se debe quedar atrás.
