Ante el desarrollo del temporal, principalmente en Orihuela y su comarca de la Vega Baja, por la subida del río Segura y las duras consecuencias que esta ha provocado, la diócesis de Orihuela-Alicante, en la persona de su obispo Jesús Murgui, desea manifestar su profundo agradecimiento a todas las autoridades y colectivos que han contribuido- con gran entrega, solidaridad y profesionalidad- a las labores de ayuda y salvamento. Desde voluntarios y sociedad civil, hasta los servicios de emergencias, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, gobiernos locales, autonómicos y central… que siguen trabajando con gran coordinación y abnegación. Así como al propio Seminario Diocesano, que ofreciéndose como albergue ha llegado a acoger a casi un centenar de personas evacuadas. Y tantas parroquias de numerosos pueblos de la comarca que han puesto al servicio de todos los afectados sus instalaciones parroquiales siendo acompañados por voluntarios, fieles, sacerdotes y miembros de Cáritas, convirtiéndose en refugio y hogar durante estos duros instantes.
Por otra parte el obispo diocesano pide a su clero y a todos los fieles de Orihuela-Alicante, ofrecer las eucaristías y rezos del fin de semana por las víctimas mortales de este temporal así como por todas aquellas personas y familias que han perdido sus cosechas o han visto afectados o en peligro sus hogares, bienes o medios de vida. Vaya para ellas todo el ánimo, apoyo y consuelo posible. Dando las gracias a Dios, por otra parte, por toda esa gran labor de apoyo, trabajo y entrega de tanta gente voluntaria y de todas las entidades, instituciones y servicios de emergencia que han contribuido.
