La liturgia eucarística fue la propia del domingo 27 del tiempo litúrgico ordinario, ciclo B de lecturas. Las casullas del Papa Benedicto XVI y los concelebrantes fueron, pues, de color verde. El número de concelebrantes ascendía a 409, de ellos 47 cardenales.
Los primeros concelebrantes fueron la “mesa” (los tres presidentes delegados, el secretario general, el secretario especial y el relator general) del Sínodo de la Nueva Evangelización –XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos- y los presidentes de las Conferencias Episcopales de España (cardenal Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid) y de Alemania (arzobispo Robert Zollistch, arzobispo de Friburgo de Brisgovia).
En razón de la precedencia y antigüedad en el cargo de los citados, el cardenal Rouco fue el primer concelebrante.
Distribuyeron la comunión 220 sacerdotes. Canto la Capilla Sixtina con el Coro Mater Ecclesiae. Hubo cuatro diáconos asistentes y otros doce para la distribución de la eucaristía y otros dieciséis acólitos o ministrantes.
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